Las mascarillas se han convertido en un complemento imprescindible en nuestro día a día. Por lo que las fundas guardamascarillas, pueden ser un complemento imprescindible y perfecto para tu seguridad.
Algunas mascarillas son reutilizables y se pueden volver a usar aunque las hayas llevado durante unas horas. Otras como, por ejemplo, las mascarillas quirúrgicas no son reutilizables, pero en ocasiones necesitamos ponernos y quitarnos la mascarilla, o bien, hacemos un uso tan puntual de ella que no es necesario que la tiremos inmediatamente a la basura, aunque tampoco se deben guardar en el bolsillo o en el bolso, ni mucho menos dejar en cualquier sitio, como en las mesas.
Imagina que has salido de casa sólo un corto periodo de tiempo, por ejemplo, a sacar la basura, a comprar el pan, o que estás en una terraza tomando algo ¿qué se debe hacer en estos casos? Lo mejor para proteger, almacenar y evitar que se contamine la mascarilla es utilizar una funda guarda-mascarillas.
Motivos por los que estas fundas portamascarillas se han convertido en un complemento de alta funcionalidad e imprescindible en el día a día:
- SEGURIDAD: evita que la mascarilla se ensucie o contamine. Además, el cierre de velcro permite que la mascarilla se mantenga limpia y segura en todo momento protegiéndola del polvo, suciedad y contaminación.
- PORTÁTIL: diseño delgado y flexible, fácil de transportar y llevar sin apenas notarla en bolsillos o bolsos pequeños
- REUTILIZABLE: se puede utilizar en varias ocasiones y es muy fácil de limpiar.
- DISEÑO: puede ser totalmente personalizada con tu logo o imagen de marca.
- MATERIAL: fabricada en no-tejido hipoalergénico, un material flexible y ligero con un tacto agradable a la piel
- VERSÁTIL: válido tanto para todo tipo de mascarillas, así como para niños y adultos.
Y recuerda que, tan importante como llevar correctamente las mascarillas, es almacenarlas y guárdalas con total seguridad, por ello, utiliza fundas y bolsas apropiadas para ello para que no pierda efectividad.